jueves, 19 de septiembre de 2013

Predica la Palabra de Dios

"¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? ¿Y cómo predicarán si no fueren enviados? Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!" Romanos 10:14-15.

 Somos hijos de la Dios y debemos ser la luz en la oscuridad. Hace tiempo, empecé a hacer una tarjetas para regalar a todas las personas que pudiera, al principio pensé: ¡Que vergüenza!, ¿que pensarán de mi?... Luego, pensé: Es mi responsabilidad como cristiana predicar el evangelio, el Espíritu Santo transformará esas vidas, pero es mi deber dar el paso.
 Puede que la gente se ria, se extrañe, se burle... Pero eso, no va a frenar la bendición ni el plan de Dios.
 Tomé la decisión, me resultó sencillo recortar las tarjetas, no me costó nada en realidad, y Dios puso esto en mi corazón:


 Hijos de Dios, les animo a trabajar para la Excelencia, a usar su creatividad para glorificar a Dios. ¿Cuántas almas puedo ganar para Dios?. No lo sé, nunca lo sabré, pero no voy a parar. 
 "No sabéis que los que corren en el estadio, todos a la verdad corren, pero uno solo se lleva el premio? Corred de tal manera que lo obtengáis". 1 Corintios 9:24.
 El mundo necesita desesperada y urgentemente el verdadero amor. No te lo guardes solo para ti. ¡Compártelo!. ¡Predica la Palabra de Dios!. ¡Somos colaboradores de Dios!.




"Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios..." Romanos 1:16.








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