Obediencia a Cristo.

 "Jesucristo es el mismo ayer, y hoy , y por los siglo." Hebreos 13:8.

 El domingo, me visitó una hermana de la Iglesia, estuvimos conversando, escuché su testimonio, compartió su tiempo conmigo, antes de orar, me dijo que leyese 2 Corintios 10:3, 4 y 5; también Filipenses 4:13.
 El lunes, comencé a leer un libro de evangelización, y en la tapa del libro estaba escrito Hebreos 13:8, al abrirlo, el primer tema era: ¡Estimula tu Espíritu!, mientras leía, me di cuenta de que hablaba de la obediencia a Cristo, de llevar los pensamientos a la obediencia de la palabra y ahí también estaba el versículo 2 Corintios 10:5.

 "Pues aunque andamos en la carne, no militamos según la carne; porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo." 2 Corintios 10:3,4 y 5.